Este relato navideño es un pequeño refugio donde detenerse, respirar y recordar todo lo que importa.
Es importante leerlo después de haber vivido las historias de los cuatro hermanos Levedev.
A través de los ojos de Lena, el corazón silencioso de los Levedev, recorremos tres momentos distintos en el tiempo, pero siempre con la misma certeza: que el verdadero milagro no es la ausencia de dolor, sino encontrar amor y refugio incluso en medio del invierno más duro.
Navidad tras Navidad, Lena nos enseña que el amor, cuando se elige y se cuida, nunca desaparece.
No estás preparada para Ilya Levedev
En un juego de provocaciones y silencios, las miradas que queman más que las palabras.
Ilya nunca se toma nada en serio.
Rieke nunca se permite sentir nada.
Hasta que dejan de poder evitarse.
Hasta que mirarse es demasiado.
Una historia donde la tensión se palpa, los secretos respiran y el amor… arde lento, profundo e imposible de detener.
